Hablamos de un conjunto de hábitos que nos permiten mejorar nuestras relaciones interpersonales, obtener lo que queremos, sentirnos bien y conseguir que otras personas no nos impidan alcanzar nuestras metas.
Las habilidades sociales son conductas necesarias para relacionarse e interactuar de manera adecuada con otras personas, lo que nos permite desarrollar relaciones sociales satisfactorias.
Tienen lugar en situaciones sociales en las que, al menos, participan dos personas. Y cuando uno se expresa de manera hábil socialmente, la relación social resulta efectiva y satisfactoria para todos los miembros, dado que todos defienden sus ideas y expresan acuerdo o desacuerdo respetando sus ideas y sin generar malestar en la otra persona.
Son comportamientos aprendidos y modificables, por lo que no es una característica de la personalidad o un rasgo innato que no se pueda cambiar.
Cuando hablamos de habilidades sociales, no sólo es importante tenerlas, sino también ponerlas en práctica en la situación adecuada y en el momento óptimo. De esta forma, podremos decir que somos personas competentes socialmente.
Cuando una persona es hábil socialmente, es capaz de pedir aquello que quiere o necesita o negarse cuando no es lo que está dentro de sus planes, siempre de manera adecuada. Además, es capaz de conseguir sus metas propuestas sin pasar por encima de otras personas, expresando sus necesidades, sentimientos, pensamientos, realizando elecciones personales y sintiéndose bien consigo mismo.
Puedes tener un déficit en las habilidades sociales si presentas alguna de estas características:
– Tienes dificultades para iniciar o mantener conversaciones
– Evitas determinadas situaciones donde tienes que hablar con otras personas porque no sabes qué decir o cómo actuar
– Como no quieres enfrentarte con los demás, prefieres callar antes que discutir, aunque algo no te parezca lo más acertado
– Te gusta tener razón por encima de todo con el fin de hacer lo que quieres
– Los demás tienen más facilidad que tú para conocer y relacionarse con otras personas
– Consideras que los demás son mucho más carismáticos que tú
– Consideras que tienes dificultades para conocer gente nueva o para ligar
– Ante un enfrentamiento te descontrolas y no sabes manejar la situación o por el contrario sientes que no has sabido cómo defenderte
– No sabes cómo decir que no porque te sabe mal quedar mal con otras personas
– Los demás te dicen que te muestra demasiado cercano ante personas que no son de tu círculo más íntimo
Mediante la terapia psicológica pueden trabajarse y mejorarse las habilidades sociales, lo que repercutirá en que obtengas relaciones sociales más satisfactorias, mayor bienestar, mayor seguridad y autoestima.
Es importante trabajar las habilidades sociales porque las relaciones sociales son una de las principales fuentes de bienestar, pero también puede causar inseguridad y estrés si no tenemos estas habilidades.
Esto nos conducirá a emociones y pensamientos negativos que pueden perjudicar a nuestra autoestima y disminuir nuestra calidad de vida.
La psicóloga de nuestro centro evaluará tu problema, observando cuáles son tus dificultades alrededor de las habilidades sociales. Una vez obtenida la información, la pondrá en común contigo para que juntos obtengáis las estrategias más adecuadas que te permitan desarrollar y perfeccionar unas adecuadas habilidades sociales. Ello te ayudará a obtener relaciones sociales de mayor calidad y a sentirte mejor contigo mismo.
– Las habilidades sociales son un componente importante de la inteligencia emocional. Aquellas personas con mayores habilidades sociales, son personas con una mayor inteligencia emocional.
– En algunos casos, puede ser apropiado que participes en un grupo de habilidades sociales. Son grupos dirigidos por una psicóloga donde se trabaja con otras personas que también tienen alguna dificultad en las habilidades sociales.
– Si tienes algún problema en las habilidades sociales ha sido aprendido, e igual que has aprendido de manera inadecuada, puedes desaprenderlo y volver a aprender un patrón adecuado y hábil socialmente.
– Decir “no” cuando realmente no queremos hacer algo es una de las habilidades más difíciles para nosotros (y también es una falta de habilidad social).
– Las habilidades sociales incluyen aspectos verbales (saludar, decir que no, pedir perdón…) pero también no verbales (postura, tono, ritmo de habla…).