La terapia psicológica es el proceso que tiene lugar entre un psicólogo (con la formación y las habilidades adecuadas) y un paciente que acude a consulta con el objetivo de mejorar su calidad de vida.
El trabajo irá dirigido a enseñarte diferentes estrategias y técnicas para hacer frente y superar el problema que te ha traído a consulta.
Los problemas por los que puedes solicitar ayuda son variados y a través del proceso psicoterapéutico propiciaremos cambios congruentes con los objetivos que deseas alcanzar.
En ocasiones consideramos que nuestro problema no es lo “suficientemente importante” como para solicitar ayuda profesional. Sin embargo, hay muchos problemas aparentemente simples que no nos permiten llevar una vida satisfactoria o plena.
Algunos de estos problemas pueden afectar a tu experiencia personal, a tu relación con los demás o a las personas de tu alrededor.
Pueden ser pensamientos o emociones negativos persistentes que no puedes manejar (tristeza, ansiedad, celos, irritabilidad, ira, enfado, rencor…), adaptación a nuevas situaciones (separación o divorcio, maternidad, cambio de residencia o de trabajo, pérdida de estatus, aceptación de una enfermedad…), toma de decisiones complicadas, distintos comportamientos que influyen en tu vida, insatisfacción vital (muchas personas creen tenerlo todo pero aún así se sienten vacías o tristes), situaciones personales adversas (proceso de enfermedad, duelo familiar o gestacional, acoso laboral o escolar…).